Enfermedad inflamatoria del intestino
La enfermedad inflamatoria del intestino (EII) es el nombre de un grupo de afecciones que provocan inflamación (enrojecimiento, hinchazón y a veces dolor) del sistema digestivo. Los tipos más comunes de EII son la colitis ulcerativa y la enfermedad de Crohn. Estas provocan síntomas similares, como diarrea, dolor abdominal y fiebre. La EII afecta a las mujeres de maneras singulares. Los síntomas de la EII pueden empeorar durante el período menstrual y pueden causar problemas para quedar embarazada.
¿Qué es la EII?
La EII es el nombre de un grupo de afecciones que provocan inflamación (enrojecimiento, hinchazón y a veces dolor) del sistema digestivo.
El sistema digestivo va desde la boca hasta el ano. Si tu sistema digestivo es saludable, los alimentos pasan sin problemas por el sistema digestivo y salen del cuerpo. Tu cuerpo absorbe los nutrientes que necesita de los alimentos. El resto pasa a través de tu cuerpo y sale en forma de orina (pis) o materia fecal (heces).
Si tienes EII, parte de tu sistema digestivo está inflamado. Con el tiempo, la inflamación puede causar dolor intenso, diarrea y a veces heces con sangre. Los síntomas de la EII aparecen y desaparecen en episodios o recrudecimientos. Debido a la inflamación de tu sistema digestivo provocada por la EII, tu cuerpo no puede absorber todos los nutrientes que necesita. Esto puede generar malnutrición, otros síntomas de EII u otros problemas de salud, como anemia.
¿Cuáles son los distintos tipos de EII?
Los tipos más comunes de EII son la colitis ulcerativa y la enfermedad de Crohn. Estas enfermedades son similares pero afectan a distintas partes del sistema digestivo.
- La colitis ulcerativa afecta al intestino grueso y al recto. La enfermedad causa inflamación y diminutas llagas abiertas, o úlceras, en la superficie que recubre el intestino grueso o el recto. Las úlceras pueden sangrar y producir pus. Con la colitis ulcerativa, hay un área continuamente dañada en el intestino grueso y el recto en lugar de zonas de daño.
- La enfermedad de Crohn puede afectar cualquier parte del sistema digestivo, desde la boca hasta el ano. La inflamación en la enfermedad de Crohn suele ocurrir en zonas de los órganos digestivos, como el estómago o los intestinos. Con la enfermedad de Crohn, hay un tejido normal junto a un área inflamada, o zonas de daño.
¿Algunas mujeres tienen más riesgo de padecer EII?
Sí. Tu riesgo de padecer EII es mayor si:
- Eres caucásica hispana o no hispana.1 En el pasado, estudios demostraron que las personas no hispanas de raza negra tienen los índices más bajos; sin embargo, los estudios recientes han arrojado que la EII está aumentando en las personas afroamericanas o hispanas.2
- Eres judía de descendientes europeos (asquenazí)3
- Fumas. Si fumas, es más probable que contraigas la enfermedad de Crohn.
- Tienes familiares con EII.4 Los investigadores creen que ciertos genes que heredas de tu familia pueden causar que el sistema inmunológico de las personas con EII sobrerreaccione o genere dolor e inflamación.
¿Cómo afecta la EII a las mujeres?
La EII afecta a las mujeres de maneras singulares. Puede causar:
- Más síntomas menstruales. Las mujeres con EII son más propensas a experimentar síntomas premenstruales, como cefaleas5 y dolor menstrual.6 La diarrea, el dolor abdominal y otros síntomas de la EII pueden ser más intensos antes o durante tu período menstrual.7 Lleva un registro de tus síntomas para que puedas hablar con tu médico o enfermera sobre las formas de controlarlos.
- Anemia por deficiencia de hierro. El riesgo de sufrir anemia por deficiencia de hierro es mayor para las mujeres que tienen EII en comparación con aquellas que no padecen la enfermedad. Si tienes EII, es posible que tu cuerpo no absorba bien el hierro y tienes más riesgo de sangrado en el sistema digestivo.
- Problemas para quedar embarazada. Durante un recrudecimiento de los síntomas de la EII, es posible que tengas problemas para quedar embarazada.8 Lee más sobre el embarazo y la EII.
¿Cuáles son los síntomas de la EII?
Los síntomas de la EII suelen ser similares para la colitis ulcerativa y la enfermedad de Crohn. Los síntomas incluyen:9,10
- Diarrea (heces flojas y acuosas con la enfermedad de Crohn o sangrantes con la colitis ulcerativa)
- Dolor intenso o crónico por calambres en el abdomen
- Pérdida del apetito, lo que genera pérdida de peso
- Fatiga
- Fiebre
- Sangrado rectal
- Dolor en las articulaciones
- Problemas cutáneos, como erupciones
Los síntomas varían entre leves y graves. A veces, los síntomas pueden desaparecer por meses o incluso años (llamado remisión) antes de regresar (llamado recrudecimiento).
¿Qué causa la EII?
Los investigadores no saben con certeza cuál es la causa de la EII. El sistema inmunológico (defensa) del cuerpo puede provocar la EII. Por lo general, el sistema inmunológico protege el cuerpo de infecciones causadas por virus y bacterias (gérmenes). Una vez que desaparece la infección, esa parte del sistema inmunológico "se cierra" hasta que es necesaria de nuevo.
Sin embargo, en las personas con EII, el sistema inmunológico puede sobrerreaccionar ante las bacterias normales en el sistema digestivo. Cuando comienza el sistema inmunológico, no se cierra cuando debería hacerlo. Con el tiempo, genera inflamación, lo que daña el sistema digestivo.
Si bien los investigadores no saben por qué comienza la EII, algunos estudios sugieren que el riesgo de desarrollar EII puede ser mayor para las mujeres que tomar antibióticos,11 pastillas anticonceptivas,12 o antiinflamatorios no esteroides (AINE), como la aspirina o el ibuprofeno.13
El estrés no causa EII. Sin embargo, puede empeorar los síntomas de la EII.
¿Cómo se diagnostica la EII?
Si crees que tienes EII, habla con tu médico o enfermera. Tu médico hará preguntas sobre tus síntomas y hará pruebas para descubrir si tienes EII y, de ser así, qué tipo.
Algunas pruebas utilizadas para diagnosticar la EII incluyen:
- Análisis de sangre. Tu médico enviará una muestra de sangre a un laboratorio para analizar si existe inflamación, otros signos de EII o anemia.
- Muestra de materia fecal (heces). Tu médico enviará una muestra de las heces para analizar en busca de sangre y otros signos de inflamación relacionados con la EII.
- Colonoscopia o sigmoidoscopía. Para ambas pruebas, los médicos insertan un tubo largo y delgado con una cámara iluminada en el ano mientras estás anestesiada (inconsciente). La imagen aparece en una pantalla. Durante una sigmoidoscopía, tu médico observa el recubrimiento de la parte inferior del intestino grueso. Durante una colonoscopía, tu médico observa el recubrimiento de todo el intestino grueso y, a veces, una pequeña parte del intestino delgado. Tu médico busca signos de inflamación, sangrado o úlceras. Durante el examen, el médico puede hacer una biopsia para tomar una muestra de tejido del recubrimiento del tracto digestivo y lo observa con un microscopio.
- Endoscopía superior. Mientras estás sedada, el médico mete un endoscopio, un tubo flexible con una cámara, por el esófago (tubo de alimentos) y el estómago y hasta el intestino delgado para analizar su recubrimiento. El médico puede tomar una muestra de tejido durante este procedimiento.
- Estudio radiológico del intestino delgado. Beberás un líquido que contiene una tintura especial que se muestra en las radiografías. A medida que la tintura se mueve desde el estómago hasta el intestino, un radiólogo realizará una radiografía para buscar problemas. Este procedimiento se suele realizar después de una endoscopía superior.
- Tomografía axial computarizada (TAC). Una TAC toma radiografías de varios ángulos diferentes del cuerpo. El médico analiza las radiografías en busca de inflamación.
- Enterografía por TAC o resonancia magnética (RM). La enterografía por TAC utiliza un tipo especial de radiografía para buscar problemas en el tracto digestivo. La enterografía por RM es otra forma de observar el tracto digestivo, pero no utiliza la radiación de las radiografías. Para ambos procedimientos, bebes un líquido con un tinte o solución por contraste. La solución colorea el tracto digestivo y deja ver a los médicos las áreas con problemas al utilizar radiografías o campos magnéticos.
- Endoscopia capsular. Un endoscopio capsular es una pequeña cámara en forma de píldora que debes tragar. Luego, la cámara viaja por el sistema digestivo. Graba un video del intestino delgado y lo envía a una pantalla donde el médico puede mirarlo.
¿Cómo se trata la EII?
Los tratamientos para la EII pueden incluir:
- Medicamentos. La mayoría de la gente con EII toman medicamentos para controlar sus síntomas.
- Cirugía. La cirugía puede ser una opción en caso de que los medicamentos no funcionen para controlar tus síntomas. Conoce más sobre la cirugía para la enfermedad de Crohn y la cirugía para la colitis ulcerativa.
- Medidas que puedes tomar en el hogar. El médico puede hablar contigo sobre las medidas que puedes tomar en el hogar para ayudarte a controlar los síntomas y prevenir los recrudecimientos.
- Cambios en tus hábitos alimenticios. Evitar ciertos alimentos, cambiar otros hábitos alimenticios y limitar o evitar el alcohol puede ayudarte a controlar los síntomas durante los recrudecimientos.
Algunas formas de psicoterapia, a veces llamada "terapia mediante el habla", también puede ayudarte a lidiar con el estrés relacionado con los síntomas de la EII y ayudar a que el dolor sea menos intenso.14 Tu médico puede derivarte a un consejero o terapeuta, o puedes encontrar uno en https://findtreatment.samhsa.gov/.
Algunos consejeros se especializan en las personas que tienen EII. Un consejero puede ayudarte a hablar sobre cualquier emoción angustiante que puedas tener con respecto a los síntomas de la EII. El consejero también puede tratar la ansiedad, la depresión y otras preocupaciones de salud mental. Pídele a tu médico o enfermera una derivación o recomendación de un consejero en tu área.
¿Qué medicamentos tratan la EII?
Los medicamentos utilizados para tratar la EII ayudan a reducir la inflamación, aliviar los síntomas y prevenir futuros recrudecimientos. Es posible que tu médico te administre:10,15
- Medicamentos para controlar la inflamación, tales como:
- Aminosalicilatos, que también pueden ayudar a prevenir los recrudecimientos. La mayoría de las personas con colitis ulcerativa leve a moderada, y algunas personas con la enfermedad de Crohn reciben tratamiento con aminosalicilatos.
- Terapias biológicas, que bloquean las sustancias en tu cuerpo que causan inflamación
- Antibióticos, que pueden ayudar si tienes una infección o una proliferación excesiva de bacterias
- Medicamentos para calmar tu sistema inmune, tales como:
- Corticosteroides, que son medicamentos fuertes de acción rápida para tratar los recrudecimientos de la EII. Solo los tomarás a corto plazo. Si se toman durante mucho tiempo, los corticosteroides pueden generar efectos secundarios graves, entre ellos pérdida ósea.
- Inmunosupresores, que pueden tardar hasta 6 meses en hacer efecto. Sin embargo, a diferencia de los corticosteroides, los inmunosupresores se pueden tomar a largo plazo para prevenir los recrudecimientos.
Quizás necesites probar con diferentes medicamentos antes de encontrar uno que funcione mejor para ti.
¿Necesitaré cirugía para la enfermedad de Crohn?
Es posible. Más de la mitad de las personas con la enfermedad de Crohn necesitan cirugía en el plazo de 20 años de haber recibido el diagnóstico.16 La cirugía puede aliviar los síntomas, pero no cura la enfermedad.
Las cirugías para la enfermedad de Crohn incluyen:15
- Resección intestinal. En esta cirugía, el médico extrae la parte dañada del intestino delgado o grueso y une los dos extremos sanos.
- Extracción del intestino grueso, inclusive el recto. Después de este procedimiento, tu cuerpo ya no puede deshacerse de los desechos sólidos por su cuenta. El médico hará una pequeña abertura en el frente de tu pared abdominal. Luego, traerá el extremo del intestino delgado a través del agujero. Esto permite que el cuerpo drene los desechos. Se utiliza una bolsa sobre la abertura para recolectar los desechos. Deberás vaciar la bolsa varias veces al día.
- Fistulotomía. Algunos pacientes desarrollan una acumulación de pus o un drenaje de pus de una abertura (o fístula) alrededor del ano. Es posible que se requiera una cirugía para drenar el pus e introducir un pequeño cable (un setón) para evitar que el pus se siga acumulando.
¿Necesitaré una cirugía para la colitis ulcerativa?
Es posible. Cerca de 1 de cada 3 personas con colitis ulcerativa necesitarán cirugía para tratar la colitis ulcerativa en algún momento.17
La cirugía para extraer todo el intestino grueso y el recto puede curar la colitis ulcerativa. Una vez que se extrae el intestino delgado y el recto, tu cuerpo ya no puede deshacerse de los desechos sólidos por su cuenta. Tu médico hará uno de dos tipos de procedimientos para permitir que el cuerpo se deshaga de los desechos:10
- El médico hará una pequeña abertura en el frente de tu pared abdominal. Luego, traerá el extremo del intestino delgado a través del agujero. Esto permite que el cuerpo drene los desechos. Se utiliza una bolsa sobre la abertura para recolectar los desechos. Deberás vaciar la bolsa varias veces al día.
- El médico adherirá el extremo del intestino delgado dentro del ano, donde solía estar el recto, creando una bolsa interna. Este procedimiento se denomina anastomosis ileoanal. Los desechos se almacenan en la bolsa y salen del ano de la forma habitual.
El tipo de procedimiento que realice el médico depende de tus síntomas y su intensidad, tu edad y cómo el procedimiento afectará tu calidad de vida, por ejemplo, los tipos de actividades que realizas.
¿Qué puedo hacer en casa para aliviar los síntomas de la EII?
Tu médico hablará contigo sobre las medidas que puedes tomar en el hogar para aliviar los síntomas de la EII. Algunas medidas pueden ser:
- Reducir el estrés. El estrés no genera EII, pero puede empeorar los síntomas. Algunos estudios demuestran que la terapia de la conciencia plena, la hipnoterapia y la psicoterapia pueden ser de gran ayuda.18 Obtén consejos para aliviar el estrés.
- Cambiar tus hábitos alimenticios. Algunas mujeres manifiestan que limitar o evitar ciertos alimentos ayuda a aliviar los síntomas.19
- Tomar suplementos vitamínicos. Es posible que tu médico sugiera que tomes suplementos vitamínicos si tu cuerpo no obtiene todos los nutrientes que necesita de los alimentos por culpa de la EII. Posiblemente debas tomar vitamina B12, ácido fólico, vitamina D, calcio o hierro.
- Tomar probióticos. Algunas investigaciones sugieren que los probióticos, que son bacterias vivas similares a las que se encuentran naturalmente en el cuerpo, pueden ayudar a algunas personas con EII.20 Los probióticos se hallan en yogures que indican que son "cultivos vivos y activos" en la etiqueta. Los probióticos también vienen en forma de suplementos que puedes comprar en muchas tiendas. Las vitaminas y suplementos no están controlados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, siglas en inglés) de la misma forma que los medicamentos. Habla con tu médico o enfermera sobre los suplementos que tomas, inclusive los probióticos.
¿Cambiar mis hábitos alimenticios puede ayudar a tratar la EII?
Es posible. Los investigadores no tienen suficientes pruebas para demostrar qué dietas, alimentos o ingredientes específicos pueden empeorar o mejorar los síntomas de la EII. Algunas mujeres dicen que cambiar los alimentos que consumen ayuda a aliviar sus síntomas durante los recrudecimientos. La mayoría de los médicos recomienda evitar alimentos procesados y aquellos con muchos aditivos, como el carragenano y la maltodextrina (aglutinantes).
Habla con tu médico sobre los alimentos específicos que deseas consumir o evitar.21
¿La EII puede generar otros problemas de salud?
Sí. La EII puede generar otros problemas de salud. Algunas de las afecciones incluyen:
- Anemia por deficiencia de hierro.22 La anemia por deficiencia de hierro ocurre cuando tus niveles de glóbulos rojos saludables, que transportan oxígeno a las distintas partes del cuerpo, están por debajo de lo normal. Esto puede ocurrir debido a la pérdida de sangre desde el sistema digestivo.
- Deshidratación o malnutrición.23 La diarrea y el dolor por calambres pueden generar problemas para comer o para que tu cuerpo obtenga los nutrientes que necesita. Es posible que necesites una intravenosa o un tubo de alimentación para reemplazar los fluidos y nutrientes perdidos.
- Megacolon tóxico. El megacolon tóxico ocurre cuando el intestino grueso se inflama rápidamente y deja de funcionar. El megacolon tóxico es grave y puede causar dolor intenso e incluso muerte.24
- Cáncer de colon. La enfermedad de Crohn puede aumentar tu riesgo de desarrollar cáncer de colon.25 Habla con tu médico sobre tu riesgo.
- Huesos débiles.26 La enfermedad de Crohn puede causar pérdida de la masa ósea y osteoporosis. Los medicamentos para tratar la colitis ulcerativa también pueden provocar pérdida de la masa ósea.
- Inflamación dentro del cuerpo. La EII puede causar problemas hepáticos, cálculos biliares y pancreatitis (inflamación del páncreas).27
- Cálculos renales. Los cálculos renales son pequeñas piedras dolorosas, a veces formadas por el oxalato (un tipo de sal) de los riñones. Son comunes en las personas con la enfermedad de Crohn.28
Algunos de estos problemas de salud mejoran cuando se trata la EII. Otros se deben tratar por separado.
Si bien estas afecciones no son necesariamente causadas por la EII, las personas con EII son más propensas a padecer depresión y ansiedad, en especial durante los recrudecimientos.29 La depresión y la ansiedad son problemas de salud mental graves que tienen tratamiento. Habla con tu médico, enfermero o consejero. Encuentra un consejero ingresando tu ubicación en https://findtreatment.samhsa.gov/.
¿Necesito someterme a pruebas de detección de cáncer de colon?
Sí. Todas las personas deben realizarse pruebas de detección de cáncer de colon a principios de los 50 años. Sin embargo, si tienes la EII, tu riesgo de desarrollar cáncer de colon es mayor. Debes realizarte pruebas de detección a una edad más temprana o con mayor frecuencia que las personas con la EII.
- Habla con tu médico sobre cuándo comenzar con las pruebas de detección de cáncer de colon, qué pruebas realizar y con qué frecuencia.
- Las sugerencias de tu médico dependerán de tus antecedentes familiares, por cuánto tiempo has tenido la EII, si el colon está afectado por la enfermedad y su gravedad.
- Si has tenido EII por 8 a 10 años, tu médico puede recomendarte una colonoscopía con biopsias cada 1 a 2 años. Esta prueba detecta las señales tempranas de cáncer.
¿Cómo afecta la EII al embarazo?
La EII puede afectar tus probabilidades de quedar embarazadas y tus síntomas durante el embarazo. Las mujeres embarazadas con EII pueden tener un embarazo de alto riesgo.
- Antes de quedar embarazada: puedes experimentar más problemas para quedar embarazada durante un recrudecimiento (cuando los síntomas aparecen después de haber desaparecido por un tiempo). Además, si tienes EII, habla con tu médico sobre el riesgo de problemas durante el embarazo. Si tienes un recrudecimiento durante el embarazo, puedes tener un riesgo ligeramente mayor de sufrir un parto prematuro, bajo peso al nacer y parto por cesárea que las mujeres que no padecen la enfermedad.30
Es posible que tu médico cambie el tipo o la dosis del medicamento que tomas. Algunos medicamentos, como el metotrexato y la talidomida, provocan defectos congénitos y otros problemas de salud, y no deberían tomarse durante el embarazo o en el período de lactancia materna.31 Si hay posibilidades de que estés embarazada, habla con tu médico sobre cualquier medicamento que tomes.
- Durante el embarazo: algunas mujeres dicen que sus síntomas mejoran durante el embarazo, pero otras dicen que empeoran. Las mujeres cuya EII está en remisión (cuando los síntomas desaparecen por meses o incluso años) antes de quedar embarazadas son más propensas a mantenerse sin síntomas durante el embarazo.31
¿Puedo tratar la EII si estoy embarazada o en período de lactancia materna?
Sí, pero tu médico puede cambiar el tipo o la dosis del medicamento que tomas. Algunos medicamentos, como el metotrexato y la talidomida, provocan defectos congénitos y otros problemas de salud, y no deberían tomarse durante el embarazo o en el período de lactancia materna.31
Antes de quedar embarazada, planifica con tu obstetra y gastroenterólogo los medicamentos que tomarás durante y después del embarazo. Toma tus medicamentos según lo indicado por el médico. Si dejas de tomar los medicamentos y tus síntomas regresan (recrudecen), puede ser difícil mantenerlos bajo control.31
Habla con tu médico sobre los medicamentos y la lactancia materna antes de dar a luz. Puedes buscar los medicamentos en la base de datos de LactMed para descubrir si pasan por la leche materna y, de ser así, si pueden tener efectos secundarios para tu bebé lactante.
¿Cómo afectará la EII a mi vida sexual?
La EII y la cirugía y los medicamentos utilizados para tratarla pueden afectar tu salud sexual. En ocasiones, simplemente puedes sentirte demasiado cansada como para tener sexo. Quizás también sufras preocupaciones emocionales en relación con la enfermedad. Por ejemplo, quizás no te sientas tan segura de tu cuerpo como lo hacías antes de que comenzaran los síntomas de la EII.
- Si sientes dolor durante el sexo, habla con tu médico o enfermera. Tu médico puede recetarte una crema hormonal o un supositorio para la vagina.
- Si tienes una bolsa externa después de una cirugía, estos son algunos consejos:
- Vacía la bolsa antes de tener sexo.
- Usa desodorantes: uno en la bolsa y quizás una píldora o líquido para tomar por vía oral (consulta a tu médico o enfermera sobre estas opciones).
- Asegúrate de que la bolsa esté bien sujeta.
- Si la bolsa estorba o causa dolor durante el sexo, experimenta con diferentes posiciones.
- Encuentra una funda para la bolsa que sea cómoda para utilizar durante el sexo, o bien busca distintas ropas que podrían cubrir la bolsa.
- Habla con tu pareja sobre cómo te sientes. Esto puede ayudar a generar intimidad y aclarar cualquier malentendido.
- Considera hablar con un consejero o terapeuta. Algunos consejeros se especializan en las personas que tienen EII. Un consejero puede ayudarte a lidiar con las emociones angustiantes provocadas por los síntomas de la EII. El asesoramiento también puede tratar la ansiedad, la depresión y otras preocupaciones de salud mental. Pídele a tu médico o enfermera una derivación o recomendación de un consejero en tu área.
¿Pudimos responder tus preguntas sobre la EII?
Para obtener más información sobre la EII, llama a la línea de ayuda de la OWH al 1-800-994-9662 o comunícate con las siguientes organizaciones:
- Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y del Riñón, NIH, HHS
Número de teléfono: 301-496-3583 - American Gastroenterological Association
Número de teléfono: 301-654-2055 - Crohn's & Colitis Foundation
Número de teléfono: 1-800-932-2423 - Sociedad Norteamericana de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica
Número de teléfono: 215-233-0808 - Colegio Estadounidense de Gastroenterología (versión en inglés)
Número de teléfono: 301-263-9000
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