El destete de tu bebé
¿Estás preparada para el destete? ¿Crees que tu hijo está preparado para el destete? Por lo general, el destete es un proceso gradual que no implica ningún esfuerzo ni acción conscientes. Pero puede ocurrir que debas destetar a tu bebé antes de que se produzca naturalmente. Si necesitas, o quieres, destetar a tu bebé de manera activa antes de que ocurra naturalmente, lo mejor es que lo hagan de manera paulatina. El destete repentino puede ser físicamente doloroso para ti y emocionalmente duro para ambos, tú y tu bebé.
¿Qué es el destete?
El destete comienza en el primer momento en el que alimentas a tu bebé con algo que no sea tu leche. El destete es el pasaje de tu bebé de la lactancia materna como forma de alimentación exclusiva al momento en que deja de amamantarse porque necesita incorporar otros nutrientes o ya no resulta cómodo.
¿Cuándo debo destetar a mi bebé?
En culturas en las que no existe presión social que exija el destete, por lo general se deja de amamantar a los niños cuando tienen entre 2½ y 7 años.1
En las familias que dejan que el proceso se dé naturalmente, el destete es muy gradual y por lo general no representa problemas ni esfuerzo.
La American Academy of Pediatrics (AAP, por sus siglas en inglés) recomienda el siguiente cronograma como guía:
- Lactancia materna exclusiva (sin ningún otro tipo de alimento ni bebida) durante los primeros 6 meses de vida de tu bebé.
- Pasados los 6 meses, sigue amamantando a tu bebé y comienza a incorporar alimentos sólidos (aquí es donde comienza el destete).
- Después de que tu bebé cumple su primer año, sigue amamantándolo mientras tú y él se sientan cómodos. Algunas mamás y bebés continúan con la lactancia pasados los dos años de vida. La lactancia materna es buena tanto para la madre como para el hijo a cualquier edad, y no hay evidencia científica que dé cuenta de ningún daño evolutivo causado por alimentar mediante lactancia materna a un niño más grande.
¿Qué signos puedo observar para saber que mi hijo está listo para el destete?
Los niños que inician el destete solos por lo general no lo hacen de repente y sin advertencia. Por lo general el proceso es lento y gradual, aun para los bebés que destetan antes de lo habitual porque se separan de sus mamás, porque usan chupete o toman biberón.
Si tu bebé rechaza tu pecho repentinamente, lo más probable es que se trate de una huelga de lactancia, y no que esté preparado para el destete. Puedes leer más acerca de las huelgas de lactancia en nuestra sección "Desafío: huelga de lactancia".
Debes estar atenta a la aparición de estos signos, que también pueden ser graduales y quizá no los notes:
- Las sesiones de lactancia se producen con menos frecuencia. A medida que los niños crecen, cada vez están más ocupados jugando, explorando y aplicando las habilidades nuevas que adquieren, como caminar, hablar y comer comidas que les resultan interesantes. Las sesiones de lactancia se van espaciando, hasta el punto en el que hay una por día. A medida que pasa el tiempo la frecuencia es de una cada dos o tres días y después solo algunas al mes.
- El bebé comienza a perder interés en la lactancia materna. Puede ocurrir que los niños pequeños (menores de 1 años) pierdan interés en la lactancia materna porque obtienen la sensación placentera que necesitan con sus chupetes o el dedo en la boca. Estos comportamientos reconfortantes pueden resultarles más familiares que la lactancia materna. Para estos bebés, por lo general, el destete no es difícil, pero igual siguen necesitando alimentarse con amor.
¿Cuándo no debo destetar a mi bebé?
Si quieres, o necesitas, destetar a tu bebé antes de que comience el destete en forma natural, hacerlo de a poco es la mejor forma.
Analiza demorar el destete si:
- Tu bebé está cortando los dientes o está enfermo. Tu bebé necesitará más mimos en estos momentos. Además, las células que combaten enfermedades (llamadas anticuerpos) de tu leche materna ayudan a tu bebé a combatir enfermedades y gérmenes.
- Tu familia está atravesando un cambio grande, como una mudanza, o si regresaste al trabajo hace poco y tu bebé asiste a la guardería. Trabajar todo el día y luego amamantar a tu bebé de noche puede ser cansador, pero sabes que no va a durar para siempre.
- Tu bebé está tratando de adaptarse. Si tu bebé resiste todos tus intentos de destete, quizá no sea el momento correcto. Si puedes, espera y vuelve a intentarlo en un mes o dos.
Si te recomendaron que dejaras de amamantar porque debes someterte a una cirugía o tomar algún medicamento, procura pedir una segunda opinión. Hay muy pocos motivos por los que es absolutamente necesario el destete completo. Es posible que puedas seguir amamantando después de la cirugía, y muchos medicamentos son seguros tanto para el bebé como para la madre.
Habla con un consultor en lactancia que puede ayudarte a decidir si realmente es necesario el destete o si simplemente necesitas ayuda para atravesar un momento complicado junto a tu bebé. También puedes llamar a la línea de ayuda de la Oficina para la Salud de la Mujer a las 1-800-994-9662, de lunes a viernes de 9 a.m. a 6 p.m. ET para hablar gratis con un colega consejero en inglés o en español.
Intenta, además, no tomar la decisión de destetar a tu bebé un día en el que la lactancia está complicada.
¿Cuánto tiempo lleva el proceso de destete?
El tiempo que lleva el destete depende de varios factores, incluidos:
- La edad de tu bebé.
- La cantidad de veces al día que lo amamantas. Esto puede variar de un día a otro, ya que quizá amamantes a tu niño como un mimo algunas veces y otras no.
- Si tu bebé está preparado para el destete.
Particularmente durante el primer año, cuando la lactancia materna es la principal fuente de nutrientes de tu bebé, el destete resulta mejor si lo haces lentamente. Elimina una sesión de lactancia por vez a lo largo de varios días. Por ejemplo, si dejas una sesión cada tres días y sueles alimentarlo unas ocho veces al día, el destete completo de tu bebé puede llevar unas cuatro semanas.
¿Mi bebé necesitará fórmula después del destete?
Depende de la edad de tu bebé.
Si tu bebé es menor de 1 año:
Tu bebé necesitará fórmula para reemplazar la nutrición que recibe de tu leche. Como tu leche materna se va modificando para cubrir las necesidades de tu bebé a medida que crece, siempre recibe la nutrición que necesita sin modificar la cantidad de leche materna que toma, así tenga 9 o 3 meses. Por ejemplo, con una sesión de alimentación de 3 onzas recibe la cantidad adecuada de calorías, nutrientes y defensas que tu bebé necesita.
Con la fórmula, no es así. Un bebé que se alimenta por lactancia materna y pasa a fórmula con el destete puede necesitar más onzas de fórmula que de leche materna.
Como la fórmula tiene un sabor diferente al de la leche materna y tomar biberón no es lo mismo que ser amamantado, debes tener paciencia con tu bebé cuando pasas a la fórmula.
Habla con el médico de tu hijo para averiguar cuánta fórmula necesita y cómo reconocer señales de que la tolera bien.
Si tu bebé es mayor de 1 año:
Puedes ofrecerle una comida o un bocadillo, o algo de agua o leche de vaca (si la tolera) en el momento en el que normalmente lo amamantarías.
Si tu hijo se resiste o no parece interesado, recuerda que la lactancia materna también es un momento en el que tu bebé está cerca de ti. A veces un mimo o sentarlo en tu falda mientras come el bocadillo ayuda a mejorar la transición del destete. Tu pediatra puede aconsejarte acerca de las mejores opciones de alimentos para tu niño pequeño.
¿Cómo desteto a mi bebé?
El destete funciona mejor si el proceso es lento, con su propio ritmo. Pero existen algunos motivos por los que podrías necesitar dejar de amamantar antes de que tu bebé esté listo, y quizá aun antes de lo que habías planificado.
Destetar a tu hijo de golpe puede causar que tus senos se hinchen y duelan.
- Si tu bebé es aún muy pequeño, es posible que debas extraerte leche de los senos si te sientes incómoda. No extraigas la cantidad habitual de una sesión de alimentación. Si te extraes o amamantas, tus senos responden produciendo más leche. Extraer menos leche de la normal implica que también producirás menos leche. Ponte en contacto con un Consultor Internacional de Lactancia Materna certificado (IBCLC, por sus siglas en inglés) si tus senos se llenan demasiado durante el destete. Busca un IBCLC en tu área.
- Necesitarás reemplazar tu leche con fórmula si tu bebé es menor de 1 año. Si tu bebé es mayor de 1 año, puedes dejar de ofrecerle tu leche materna, quitando una sesión por vez a lo largo de varias semanas.
- Comienza suspendiendo la sesión de alimentación que menos disfruta. Las sesiones de lactancia antes de dormir o cuando se despiertan suelen ser las últimas que se suspenden. Espera unos días para suspender otra sesión.
- No te sientes en una silla especial para amamantar, pero sí mímalo más o cárgalo más durante esta transición, para que igual pueda disfrutar del contacto cercano.
- Distrae a tu hijo con una actividad o salida durante los momentos en los que normalmente lo amamantarías.
- Si a tu bebé le gusta que lo amamantes para dormirlo, deja que tu pareja se ocupe de dormirlo.
- Recuerda, aun si tú y tu bebé están listos para el destete, puede ser emocionalmente difícil para ambos. Dale a tu bebé mucho amor y atención extras durante este período.
- Habla con tu hijo acerca del destete. Hasta los niños pequeños comprenden lo que dices y ofrecen sus opiniones e ideas acerca de la mejor forma de suspender la lactancia materna.
El destete puede resultarte incómodo aun si lo haces lenta y gradualmente. Prueba con estos consejos para intentar aliviar la molestia.
¿El destete duele?
Si lo haces lenta y gradualmente, no deberías sentir molestia ni dolor. El destete repentino puede causar una congestión dolorosa en tus senos. Si tu bebé aún es muy pequeño y amamantas o te extraes leche con mucha frecuencia e intentas destetarlo de golpe, el proceso puede ser molesto y doloroso.
Prueba con estos consejos para intentar aliviar la molestia.
- Extráete suficiente leche como para eliminar la presión, con tu mano o con un extractor.
- No comprimas tus senos. Hacerlo puede ocasionar que se obstruyan los conductos o una infección de los senos.
- Habla con tu médico para saber si tomar un analgésico, como ibuprofeno, ayuda.
¿Puedo usar hojas de col u otros remedios naturales para aliviar el dolor durante el destete?
Quizá. Algunas mujeres refieren que sienten alivio con hojas de col u otras hierbas o medicamentos. Siempre consulta a tu médico antes de probar cualquier remedio herbal o terapia alternativa, para confirmar que sean seguros para ti y para tu bebé.
- Quizá aplicar hojas de col frías sobre tus senos congestionados te produzca alivio. (Habla con tu médico antes de usar hojas de col si eres alérgica a la col o a la sulfamida). Enfría las hojas de col y lávalas antes de usarlas. Estruja cada hoja con tu mano para quebrar las nervaduras. Luego coloca las hojas dentro de tu sostén, sobre tus senos, y debajo de tus brazos si lo necesitas. Deja las hojas de col allí hasta que se marchiten. Coloca hojas nuevas tanto como lo necesites para aliviar la molestia.
- El té de salvia tiene estrógeno (una hormona femenina) en forma natural y puede reducir tu producción de leche. Otras hierbas que pueden ayudarte durante el destete incluyen la menta, el perejil y el jazmín. La milenrama también puede ayudar durante el destete, pero también puede producir un aborto espontáneo si la usas en las primeras etapas de un embarazo. Solo usa milenrama si estás segura de que no estás embarazada. Los antihistamínicos y los anticonceptivos hormonales también pueden contribuir a reducir la producción de leche.
¿Respondimos tu pregunta acerca del destete de tu bebé?
Para obtener más información acerca del destete, llama a la línea de ayuda de OWH al 1-800-994-9662 o consulta los siguientes recursos de otras organizaciones:
- ¿Cómo desteto a mi bebé? - Información de La Liga de la Leche Internacional.
- El destete de tu bebé (versión en inglés) - Información de la Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés).
- ¿Qué es el destete y cómo lo hago? (versión en inglés) - Información del National Institute of Child Health and Human Development.
Fuentes
- Dettwyler, K. A., Stuart-Macadam, P. (1995). Lactancia materna, perspectivas bioculturales. Piscataway, NJ: Aldine Transaction (versión en inglés).