Ataque cardíaco y las mujeres
Un ataque cardíaco ocurre cuando el flujo sanguíneo de una arteria del corazón se ve bloqueado por un coágulo o una placa y el músculo cardíaco comienza a morir. Las mujeres son más propensas que los hombres a fallecer luego de un ataque cardíaco. No obstante, si recibes ayuda rápido, el tratamiento puede salvarte la vida y evitar un daño permanente en tu corazón.
¿Qué es un ataque cardíaco?
Un ataque cardíaco ocurre cuando el flujo sanguíneo del músculo cardíaco se ve bloqueado y sus células comienzan a morir. Muchos problemas de salud pueden causar un ataque cardíaco, pero la coronariopatía es el más común.
¿Cuáles son los síntomas de un ataque cardíaco en las mujeres?
Los síntomas más comunes de un ataque cardíaco tanto en mujeres como en hombres son el dolor y la presión en el pecho y en la parte superior del cuerpo. Otros síntomas, como la falta de aire y las náuseas, son más comunes en mujeres que en hombres. Conoce los síntomas de un ataque cardíaco en mujeres.
¿Cuál es la diferencia entre un ataque cardíaco y un paro cardíaco?
Un ataque cardíaco no es lo mismo que un paro cardíaco. En un ataque cardíaco, el corazón sigue latiendo. La persona tiene pulso y, por lo general, está consciente (despierta). Durante un paro cardíaco, el corazón deja de latir. La persona no tiene pulso y está inconsciente (no despierta).
Un desfibrilador (des-fi-bri-la-DOR) es una máquina que envía una descarga eléctrica al corazón para restablecer el ritmo normal. Este tratamiento debe proporcionarse cuanto antes. En caso de un paro cardíaco, llama al 911 y comienza a hacer RCP (reanimación cardiopulmonar) de inmediato. La American Heart Association explica que, con RCP "manual", cualquier persona puede ofrecer un tratamiento que le salve la vida a alguien que está sufriendo un paro cardíaco. Presiona rápido y fuerte en el centro del pecho y continúa hasta que llegue el equipo de emergencias. No hagas RCP en caso de un ataque cardíaco.
¿Qué provoca un ataque cardíaco?
La coronariopatía (CAD, por sus siglas en inglés) causa la mayoría de los ataques cardíacos. En las personas con CAD, la placa se adhiere a las paredes de las arterias que suministran sangre al corazón. Se denomina aterosclerosis (a-te-ros-cle-RO-sis).
La placa se puede formar en cúmulos de grasa o en una capa suave y delgada. Ambos tipos son peligrosos. La placa se puede romper o desgastar, provocando que la sangre se agrupe (coágulo) en el área. Si un coágulo bloquea el flujo sanguíneo del corazón, puede provocar un ataque cardíaco.
Esta imagen muestra cómo la CAD causa un ataque cardíaco. La placa se acumula en una arteria coronaria y se forma un coágulo sanguíneo. El coágulo bloquea el flujo sanguíneo de parte del corazón, y el músculo cardíaco comienza a morir.
Un ataque cardíaco también puede ocurrir si se cierra la arteria. Se llama espasmo coronario. Los espasmos coronarios son poco comunes. Ocurren más a menudo en mujeres jóvenes que en hombres o mujeres mayores.
Obtén información sobre la CAD.
¿Cómo sé si tengo riesgo de padecer un ataque cardíaco?
Un ataque cardíaco puede ocurrirle a cualquiera, mujeres u hombres, jóvenes o ancianos. Algunas personas tienen más riesgo por ciertos problemas de salud, antecedentes médicos familiares, edad o hábitos. Se denominan factores de riesgo.
No puedes cambiar algunos factores de riesgo, como la edad, la raza o etnia o los antecedentes familiares. La buena noticia es que puedes cambiar o controlar muchos factores de riesgo, como la hipertensión, la diabetes, el tabaquismo y la mala alimentación.
Conoce más sobre los factores de riesgo para una enfermedad cardíaca que son controlables y no controlables.
¿Las mujeres de color deberían preocuparse por el riesgo de sufrir un ataque cardíaco?
Sí. Todas las mujeres deben conocer los riesgos de un ataque cardíaco y tomar medidas para prevenir una enfermedad cardíaca.
Por lo general, las mujeres afroamericanas, hispanas y nativas de América del Norte y Alaska presentan mayores riesgos de padecer un ataque cardíaco que las caucásicas.1,2 Estos factores de riesgo pueden incluir la obesidad, falta de actividad física, hipertensión y diabetes.
Además, es más probable que las mujeres afroamericanas sufran un ataque cardíaco y fallezcan en comparación con las caucásicas.3
¿Las mujeres sufren más daño que los hombres después de un ataque cardíaco?
Sí. En todos los grupos de edad, las mujeres sufren más daño que los hombres después de un ataque cardíaco. Los investigadores no están seguros de la razón, especialmente para mujeres más jóvenes.
- Las mujeres entre 45 y 65 años que tienen un ataque cardíaco son más propensas que los hombres de la misma edad a morir un año después de sufrir el ataque cardíaco.4 Sin embargo, el ataque cardíaco es menos común en mujeres jóvenes que en hombres jóvenes. Esto se debe, en parte, a que la hormona estrógeno protege a las mujeres jóvenes contra enfermedades cardíacas.
- Las mujeres mayores de 65 años son más propensas que los hombres de la misma edad a morir a las pocas semanas de haber sufrido un ataque cardíaco.4 Por lo general, las mujeres tienen ataques cardíacos alrededor de 10 años después que los hombres. En promedio, los hombres sufren su primer ataque cardíaco a los 64 años y las mujeres a los 72.
Muchas mujeres que han sufrido un ataque cardíaco siguen teniendo vidas plenas y activas. Conoce los síntomas de un ataque cardíaco y qué hacer si tienes alguno de los síntomas. Toma medidas para recuperarte luego de un ataque cardíaco y prevenir otro.
¿Cómo se diagnostica un ataque cardíaco?
Para diagnosticar un ataque cardíaco, el médico te preguntará sobre tus síntomas, salud y antecedentes médicos familiares. Además, el médico pedirá exámenes.
Por lo general, los médicos utilizan estos tipos de exámenes para diagnosticar un ataque cardíaco y escoger el mejor tratamiento.
- Análisis de sangre. Durante un ataque cardíaco, las células del músculo cardíaco mueren y se rompen. Este proceso libera proteínas en tu sangre. Los exámenes de sangre de un ataque cardíaco miden la cantidad de estas proteínas, "marcadores" del daño cardíaco. Los exámenes de sangre comunes para un ataque cardíaco son:
- Troponina cardíaca [tro-po-NI-na]. Es el examen de sangre más común. Este marcador se libera del músculo cardíaco dañado. No se encuentra en la sangre de las personas sanas. Los niveles de troponina aumentan en las tres a seis horas posteriores al comienzo del ataque cardíaco, por lo que este examen no lo diagnosticará de inmediato.
- Creatina quinasa-MB (CKMB) El examen CKMB mide la cantidad de daño del corazón debido al flujo sanguíneo bloqueado. El examen puede indicar si están funcionando los tratamientos para restablecer el flujo sanguíneo al corazón. Los niveles de CKMB aumentan en las cuatro a seis horas posteriores al comienzo del ataque cardíaco y alcanzan su máximo 24 horas después.
- Mioglobina. Este examen ayuda a diagnosticar un ataque cardíaco muy tempranamente. Luego de un ataque cardíaco, los niveles de mioglobina aumentan de una a cuatro horas después, pero alcanzan su máximo 12 horas después.
- Angiografía coronaria (an-gio-gra-FÍ-a) o angiograma. Este examen toma imágenes de un colorante que fluye a través de los vasos sanguíneos. Al observar la facilidad con que fluye el tinte, los médicos pueden localizar arterias coronarias bloqueadas o reducidas que deban abrirse, o pueden encontrar otros problemas.
Las mujeres son más propensas que los hombres a tener un tipo de placa menos común que forma un capa suave en las arterias en lugar de grandes coágulos. A menudo, los angiogramas no pueden detectar esta placa suave y delgada; aun así, es muy peligrosa. Se deben realizar otros exámenes (como los descritos más arriba) en mujeres que muestran signos o tienen síntomas de un ataque cardíaco, pero cuyos resultados de la angiografía coronaria no muestran problemas.
- Gammagrafía cardíaca nuclear. Este examen toma imágenes para mostrar las áreas del corazón que puedan estar dañadas porque no reciben suficiente sangre. Además, puede mostrar cuán bien bombea el corazón. Avísale a tu médico si estás embarazada o en período de lactancia materna. Este examen utiliza material radioactivo que puede dañar a tu bebé.
- Electrocardiograma (ECG o EKG). Este estudio detecta y registra la actividad eléctrica del corazón. Ciertos cambios en las ondas eléctricas de un ECG pueden demostrar si estás teniendo, o has tenido, un ataque cardíaco. Además, el ECG puede realizarse durante la actividad física para monitorear tu corazón cuando está trabajando fuerte.
¿Cómo se trata un ataque cardíaco?
Por lo general, el ataque cardíaco se trata con medicamentos o procedimientos no quirúrgicos que rompen los coágulos sanguíneos y restablecen el flujo sanguíneo normal al corazón. Algunos tratamientos comenzarán de inmediato, cuando llega la ambulancia. Recibirás otros tratamientos después, en el hospital.
Recibir tratamiento para un ataque cardíaco de inmediato puede ayudarte a prevenir o limitar el daño del músculo cardíaco. Por ello, es sumamente importante llamar al 911 si crees que estás teniendo un ataque cardíaco y no conducir hasta el hospital.
¿Qué medicamentos tratan un ataque cardíaco?
Los medicamentos que puedes recibir si tienes un ataque cardíaco son:
- Anticoagulantes. Estos medicamentos también se denominan trombolíticos (trom-bo-LI-ti-cos). Detienen el ataque cardíaco al romper los coágulos para abrir las arterias bloqueadas. Para un mejor funcionamiento, estos medicamentos deben administrarse lo antes posible luego de que aparezcan los síntomas del ataque cardíaco. Quizás los recibas en la ambulancia o en el hospital. Si los recibes pronto luego de tener el ataque cardíaco, tienes más probabilidades de sobrevivir y es más probable que tu corazón se recupere.
- Aspirina y antiagregantes plaquetarios. Estos medicamentos evitan que las células de la sangre se agrupen y formen nuevos coágulos. Si llamas al 911 por un ataque cardíaco, el operador puede pedirte que mastiques y tragues una aspirina mientras esperas a la ambulancia. Puede ayudarte a reducir el daño de tu corazón y el riesgo a morir en un 25 %.5 Una vez que llegues al hospital, quizás recibas otro antiagregante plaquetario diferente denominado anticoagulante por vía intravenosa (VI), que transporta el medicamento al torrente sanguíneo.
- Nitratos. Los nitratos dilatan las arterias e incrementan el flujo sanguíneo al corazón. Una vez que llegues al hospital, se te administrarán nitratos por VI. Un nitrato común es la nitroglicerina (ni-tro-gli-ce-RI-na).
- Beta bloqueadores. Los bloqueadores Beta reducen la carga de trabajo del corazón. Estos medicamentos ayudan a aliviar el dolor y la presión en el pecho, y ayudan a evitar que se repita un ataque cardíaco. Los bloqueadores Beta también se utilizan para tratar arritmias (latidos del corazón irregulares) que, por lo general, ocurren durante un ataque cardíaco.
- Inhibidores de ACE. Los inhibidores de ACE (enzima convertidora de angiotensina) reducen la presión sanguínea y la tensión del corazón. Además, ayudan a ralentizar el debilitamiento del músculo cardíaco.
Puedes recibir otros medicamentos para aliviar el dolor o la ansiedad, o bien para disminuir el colesterol.
¿Qué procedimientos tratan un ataque cardíaco?
Los procedimientos más comunes para tratar un ataque cardíaco son:
- Angioplastía y stent. La angioplastia, también llamada intervención coronaria percutánea, es un procedimiento no quirúrgico que abre las arterias coronarias bloqueadas o estrechadas. Se inserta un tubo fino y flexible con un balón médico en el extremo a través de un vaso sanguíneo hasta la arteria coronaria bloqueada o estrechada. Una vez en el lugar, se infla el balón para abrir la arteria y permitir el flujo sanguíneo al corazón. Luego, el balón se desinfla y se extrae. Se puede colocar un pequeño tubo de malla, denominado stent, de forma permanente en la arteria. El stent ayuda a evitar nuevos bloqueos de la arteria.
- Revascularización de la arteria coronaria. El cirujano utiliza un vaso sanguíneo sano de otra parte del cuerpo para redirigir la sangre alrededor del bloqueo de la arteria. Quizás necesites cirugía si más de una arteria está bloqueada o si la angioplastía y el stent no pueden restaurar el flujo sanguíneo al corazón.
Luego de un ataque cardíaco, puedes necesitar rehabilitación cardíaca para recuperarte del daño que sufrió tu corazón con el ataque cardíaco.
¿Cómo puedo prevenir un ataque cardíaco?
Todas las mujeres pueden realizar cambios para ayudar a prevenir un ataque cardíaco. Estos cambios incluyen opciones de alimentación más saludables, más actividad física y dejar de fumar. Una vez que conozcas tus factores de riesgos para un ataque cardíaco, tú y tu médico pueden trabajar juntos para disminuir los riesgos.
Incluso si ya has tenido un ataque cardíaco, puedes realizar cambios para ayudar a evitar otro. Conoce otros pasos para prevenir un ataque cardíaco y enfermedades cardíacas.
¿Pudimos responder tus preguntas sobre el ataque cardíaco?
Para obtener más información acerca del ataque cardíaco, llama a la línea de ayuda de OWH al 1-800-994-9662 o consulta los siguientes recursos de otras organizaciones:
- Ataque cardíaco (versión en inglés) - Información del Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre
- Ataque cardíaco (versión en inglés) - Información de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
Fuentes
- Giardina, E-G., Sciacca, R., Foody, J., D'Onofrio, G., Villablanca, A.C., Leatherwood, S., Taylor, A.L., …Haynes, S.G. (2011). Iniciativa de la Oficina para la Salud de la Mujer de HHS para mejorar la salud cardíaca de las mujeres: centrarse en el conocimiento y la concientización acerca de las mujeres con factores de riesgo cardiometabólicos (versión en inglés). Journal of Women's Health, 20(6), 893–900.
- CDC. (2017). Resumen de estadísticas de salud: encuestas cara a cara a nivel nacional sobre salud: 2015 (versión en inglés).
- Safford, M.M., Brown, T.M., Muntner, P.M., Durant, R.W., Glasser, S.G., Halanych, J.H., … Howard, G. (2012). Relación de la raza y el sexo con el riesgo de incidencia de enfermedades coronarias graves (versión en inglés). Journal of the American Medical Association, 308(17), 1768–1774.
- Mozzafarian, D., Benjamin, E.J., Go, A.S., et al. (2016). Estadísticas de accidentes cerebrovasculares y enfermedades cardíacas, actualización del 2016: un informe de la American Heart Association (versión en inglés). Circulation;133:e38-e360.
- Antithrombotic Trialists' Collaboration. (2002). Metaanálisis colaborativo de ensayos aleatorios de tratamiento antiplaquetario para la prevención de la muerte, el infarto de miocardio y el accidente cerebrovascular en pacientes de alto riesgo (versión en inglés). BMJ, 324, 71-86, citado en el artículo Circulation , 2012.