La salud de tu familia es tu salud
"¿Cómo pudo pasarme a mi?"
Esto es lo que la madre de una de mis colegas sigue diciendo desde que descubrió que tenía una enfermedad cardíaca.
Jane pensó que había hecho lo correcto. Después de que recibió el diagnóstico a los 67 años, sintió que estaba en la mejor forma que podía estar. Se ejercitaba a diario, escogía alimentos saludables, no bebía alcohol ni fumaba y controlaba su colesterol y presión arterial. Se sentía genial, hasta que experimentó una presión inusual en el pecho mientras caminaba. Una de sus amigas había fallecido recientemente por un ataque cardíaco, por lo que Jane se lo tomó con seriedad. Afortunadamente, lo mismo hizo su médico. Una serie de pruebas arrojó que Jane tenía bloqueos en sus arterias. Necesitaba una cirugía de corazón y se sometió a un triple bypass a poco más de tres meses de haber sentido la presión en el pecho.
El diagnóstico de Jane hizo que la mayoría de sus cinco hermanos acudan a un profesional de la salud para determinar su riesgo. El hermano de Jane, Tim, que tenía dificultad para respirar, recibió un diagnóstico similar. Él también necesitó una cirugía del corazón, y la tuvo aproximadamente en el mismo tiempo que Jane.
Si bien Jane y Tim están transitando la recuperación, esta situación los tomó por sorpresa a ellos y a su familia. No pensaban que tenían riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca. Ambos llevaban vidas generalmente saludables y no habían oído los antecedentes de su familia. Sin embargo, después de su diagnóstico, ambos descubrieron que dos de sus tíos tuvieron una enfermedad cardíaca a los 70 y 80 años.
Quería compartir esta historia porque es el Mes de los Antecedentes Médicos Familiares. Es momento de hablar con tus familiares sobre la salud de tu árbol genealógico. Después de todo, si un familiar cercano tiene una enfermedad crónica, como la enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, diabetes, o cáncer, es más probable que tú también desarrolles la enfermedad. Los antecedentes familiares también son importantes si estás planeando quedar embarazada. Querrás saber si existen antecedentes familiares de afecciones, como defectos congénitos o discapacidades del desarrollo.
Dado que no lo puedes controlar, reconocer el papel que desempeñan los antecedentes médicos familiares en tu vida puede ayudar a que te sientas menos asustada. Conocer tus antecedentes médicos familiares te permite ser proactiva, reduciendo los riesgos de formas que sí puedes controlar y prestando atención a ciertos signos y síntomas de que algo podría andar mal. Por ejemplo, si tu médico o enfermera saben que tu familia presenta ciertos problemas de salud, pueden recomendarte que cambies tu estilo de vida a uno más saludable para ayudarte a disminuir el riesgo. Estos cambios pueden incluir dejar de fumar, elegir alimentos saludables o realizar más actividad física. Tu médico o enfermera también puede recomendarte ciertas pruebas para ayudar a detectar problemas a una etapa más temprana, cuando son más fáciles de tratar. Sin embargo, no pueden hacer estas recomendaciones personalizadas si no conocen tus antecedentes médicos familiares.
La mejor forma de comprender tus antecedentes médicos familiares es hablar sobre ellos con tus familiares , ¿y qué mejor momento para hacerlo que cuando se reúnen para las fiestas? Estamos aquí para ayudarte a preparar y recopilar la información que necesitas. Prueba estos consejos:
- Comienza por lo que sabes. Haz una lista de tus parientes consanguíneos. Esto significa que comiences por tus padres, hermanos y los hijos que tengas. Luego, pasa a tu familia agrandada, como tus abuelos, tíos, tías, sobrinos, sobrinas y medios hermanos. Una vez que tengas la lista, anota las enfermedades y afecciones que conozcas.
Si eres adoptada, pregúntale a tus padres adoptivos si tienen información médica sobre tus padres biológicos. La agencia de adopción también puede tener información. Si tienes relación con tus padres biológicos, pregúntales directamente a ellos.
- Habla con tu familia. Habla con tus parientes sobre lo que conocen acerca de sus antecedentes médicos familiares. Si no los conocen, diles por qué es una herramienta importante que todos pueden usar para proteger su salud. Pregúntales lo que saben sobre los parientes que han fallecido. Luego, comparte con ellos el historial que has compilado y pregúntales si hay algo faltante. Algunas familias prefieren hablar en grupo, recordándose los unos a los otros sobre los parientes y enfermedades que podrían haber olvidado.
- Haz las preguntas adecuadas. Quieres saber si tus parientes tienen enfermedades crónicas o afecciones y si saben de algún familiar (que las tenga o haya tenido). Recuerda: cuenta la hipertensión y el colesterol como afecciones que quieres registrar. También querrás preguntarles qué edad tenían cuando fueron diagnosticados. Por último, si no lo saben, pregunta sobre la ascendencia de tu familia.
- Organiza y guarda la información. Puedes organizar y actualizar la información de tus antecedentes médicos familiares utilizando herramientas gratuitas en línea. Retrato de la salud de mi familia es fácil de utilizar y te permite ingresar tus antecedentes médicos familiares, compartirlos con tus parientes y actualizarlos con el tiempo. La mejor parte es que puedes imprimirlo y llevarlo a tu próximo control de rutina. Así, tu médico o enfermera podrán hacer recomendaciones para ayudarte a mantenerte saludable.
Sé que esto podría sentirse como añadir otra carga a un momento ajetreado de tu vida, pero también podría ser la oportunidad para conectarte con tu familia. Es posible que la salud no sea un tema de conversación frecuente, así que podrías adentrarte en un terreno nuevo o descubrir algo nuevo (y tener la oportunidad de recordar) sobre un ser querido que ha fallecido. Tómate tu tiempo y disfruta lo que espero que sea un viaje gratificante. Cuando conoces tus antecedentes médicos, toda tu familia se beneficia.
*Se ha cambiado la información de las personas de este blog para proteger su privacidad.